Los metales son una clase de materiales inorgánicos cristalinos compuestos de un solo elemento o una combinación de ellos, llamada aleación. Los metales comunes y las aleaciones de metal incluyen: aluminio, cobre, níquel, acero, latón, plata y titanio. Los metales expuestos se procesan más fácilmente usando un láser de fibra de 1,06 micrones, mientras que algunos metales también absorben, en menor medida, una longitud de onda láser de CO₂ de 10,6 o 9,3 micrones. La mejor manera de lograr un marcado láser de metales es utilizando un láser de fibra de 1,06 micrones para calentar la superficie, lo que produce una oxidación en el aire ambiental para formar un marcado permanente. También se pueden utilizar procesos adicionales en algunos metales para hacer que la superficie se ponga áspera, lo que crea una marca ligera. El grabado láser de metales se realiza con un láser de fibra de múltiples pasadas para producir una mayor profundidad. El grabado láser en metal con un láser de fibra por lo general es áspero y oxidado, y su apariencia puede ser más clara o más oscura, dependiendo del material procesado. Es posible hacer un corte láser de metales con un láser de fibra. También es posible realizar un marcado de metales ferrosos (aquellos que contienen hierro) y titanio con un láser CO₂ de 10,6 o 9,3 micrones y un lente HPDFO™ (Piezas ópticas de enfoque de alta densidad de potencia). La alta densidad de potencia del lente permite que la energía láser CO₂, de absorción menos eficaz, pueda calentar la superficie del metal, lo que produce una oxidación en el aire ambiental para formar un marcado permanente.